La académica UOH Catalina Pinto sostiene que es un desafío significativo que puede afectar la viabilidad y productividad de algunos valles emblemáticos.
Según un estudio publicado por la revista Nature Reviews Earth & Environment el 90% de las regiones vinícolas tradicionales del mundo podrían llegar a desaparecer como consecuencia del cambio climático. A este planteamiento responde la académica del Instituto de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales (ICA3) de la Universidad de O’Higgins (UOH), Catalina Pinto, quien señala que “este fenómeno (cambio climático) ha estado alterando los patrones climáticos tradicionales, lo que puede afectar la viabilidad de las zonas de producción de vinos en todo el país”.
Sin embargo, la Dra. Pinto acota que la posibilidad de que desaparezcan completamente las zonas de producción de vinos en Chile es “poco probable; nuestro país cuenta con una geografía diversa que ofrece una variedad de microclimas, lo que brinda oportunidades para la reubicación de viñedos o la exploración de nuevas zonas de cultivo. Pero, es posible que el cambio climático afecte la viabilidad y productividad de algunos valles vitivinícolas emblemáticos”.
¿Cuáles podrían ser las principales consecuencias para un país como Chile, que exporta vinos al mundo?
“En Chile, el cambio climático ha traído consigo eventos como sequías más intensas, olas de calor y cambios en los regímenes de precipitaciones y temperaturas. Las principales consecuencias del cambio climático para Chile, como exportador de vinos, incluyen la disminución de la producción y la calidad de las cepas, lo que a su vez conlleva impactos económicos negativos y cambios en patrones de consumo. Además, la industria vitivinícola necesitará invertir en medidas de adaptación para hacer frente a los desafíos del cambio climático”.
¿Se puede hacer algo al respecto?
“Sí, se pueden tomar medidas para abordar los desafíos del cambio climático en la industria vitivinícola chilena. Actualmente, se están implementando estrategias de adaptación como prácticas agrícolas sostenibles, selección de variedades de vides resistentes al estrés térmico, sequía y enfermedades. Además de implementar tecnologías de riego más eficientes”.
La académica UOH explica que también se están realizando investigaciones y programas de desarrollo para mejorar la resiliencia de la industria frente a los impactos del cambio climático. Una de esas experiencias se realiza en la Universidad de O’Higgins, mediante el proyecto FIC 40048420-0 “Transferencia: cámara de simulación agroclimática”. Esta iniciativa, liderada por la Dra. Catalina Pinto, evaluará el desempeño de vides viníferas en condiciones ambientales extremas con el objetivo de fortalecer la adaptabilidad de los viticultores de la Región de O’Higgins.
Fuente: Selso González C., Dirección de Comunicaciones, Universidad de O`Higgins.